Las enfermedades cardíacas son la principal causa de muerte a nivel mundial. De acuerdo con estimaciones de la Organización Mundial de la Salud, cada año fallecen 17.9 millones de personas por esto.
Por eso, es muy importante mantener un corazón sano y para ello, debes tomar en cuenta los factores que juegan un papel clave, incluido un seguro de salud.
Con estos consejos y hábitos, no solo lograrás un buen funcionamiento del corazón, sino que tendrás mejoras en otras áreas de tu salud, aumentando la calidad de vida. Así que ¡toma nota y actúa!
¿Qué son las enfermedades del corazón?
Las enfermedades cardiacas incluyen diferentes tipos de problemas cardiovasculares, es decir, que tienen que ver con el corazón y los vasos sanguíneos.
Estas afecciones pueden incluir problemas como la enfermedad coronaria, insuficiencia cardiaca, arritmias, entre otras.
La enfermedad cardíaca es la principal causa de muerte en países como Estados Unidos, pero hay maneras de prevenir y controlarlas.
Consejos para mantener un corazón sano
Ya sea que no hayas sufrido aún algún problema y quieras mantenerte saludable o que sí lo hayas padecido y quieras evitar que se repita o agrave, te vamos a dar algunas recomendaciones clave para cuidar la salud de tu corazón y tener una buena calidad de vida.
1. Revisiones periódicas
Una acción preventiva clave es realizar chequeos médicos regulares con un cardiólogo.
Es muy importante conocer los factores de riesgo y resolver todas las dudas que tengas al respecto para poder actuar y que no tengas ningún problema más adelante.
Para ello, es primordial contar con un seguro médico que te brinde consultas de rutina para monitorear la salud de tu corazón y mantenerlo sano. Recuerda que siempre es mejor actuar a tiempo y evitar problemas más severos o hasta letales.
2. Hacer ejercicio
El sedentarismo puede desencadenar muchos problemas. Entre ellos, la aparición de patologías como hipertensión o diabetes, además de incrementar los niveles de sobrepeso y colesterol.
Para evitar esto, la recomendación es realizar al menos 150 minutos de actividad física moderada a la semana o 75 minutos de actividad intensa.
Lo mejor es elegir una actividad o deporte que te guste y disfrutes, así no lo sentirás como obligación, sino hasta como pasatiempo.
3. Comer balanceado y saludable
Tener una alimentación saludable, basada en los nutrientes adecuados (carbohidratos, proteínas, grasas) y micronutrientes (vitaminas y minerales) es crucial para controlar los factores de riesgos y tener un corazón sano.
Asimismo, es posible reducir el riesgo cardiovascular al limitar el consumo diario de sal, y tratar de incluir vegetales variados, cereales, carnes magras, frutas, etc.
4. Limitar grasas trans
Los productos ultraprocesados, como snacks fritos, helados, cremas, galletas, etc., suelen contener un porcentaje de grasas trans, que son ácidos grasos insaturados que pueden obstruir las arterias y aumentar el colesterol malo (LDL), aumentando el riesgo de problemas cardiovasculares.
Este no es el único efecto, pues también aumentan los niveles de triglicéridos en la sangre y la inflamación, lo que tiene un papel importante en el desarrollo de enfermedades como diabetes.
Por ello, lo ideal es consumir un bajo porcentaje de ellas para mantener un corazón sano y fuerte.
5. Controlar la presión arterial
La hipertensión es uno de los principales riesgos cardiovasculares.
Tener una presión arterial elevada supone una mayor resistencia para el corazón, incrementando la masa muscular (hipertrofia ventricular izquierda) para hacer frente a ese sobreesfuerzo.
Al no venir acompañado de un mayor riego sanguíneo, este sobreesfuerzo puede producir insuficiencia coronaria o angina de pecho, lo cual es muy riesgoso, pues puede producirse un infarto o ataque cardíaco.
6. Mantener los niveles de colesterol bajos
Mantener bajo control los niveles de colesterol es clave para evitar que se dé un endurecimiento de las arterias, obstruyéndolas y produciendo un angina (dolor en el pecho) o hasta un accidente cerebrovascular.
7. Cuidar las horas de sueño
Diversos estudios, como el publicado en la revista Journal de la American Heart Association, concluyen que las personas que llevan un estilo de vida saludable y tienen un patrón de sueño constante tienen menos probabilidades de sufrir problemas cardiovasculares.
Por el contrario, aquellos que duermen a diferentes horas o un número inconsistente de horas cada noche, pueden desarrollar un endurecimiento de las arterias, conocido como arteriosclerosis.
8. No fumar
El consumo de tabaco aumenta el riesgo de padecer un infarto agudo de miocardio, que puede ser hasta tres veces más fuerte que en aquellos que no fuman.
Asimismo, cuando alguien que aún no ha tenido un evento cardiovascular deja el tabaco, disminuye el riesgo de padecerlo en un 50% 5 años después de haberlo abandonado.
Ten en cuenta que fumar no solo puede afectar tu corazón, sino provocar enfermedades graves, como cáncer. Por ello, si lo haces, es importante considerar dejar el tabaco.
9. Controlar el consumo de alcohol
La ingesta excesiva de bebidas alcohólicas puede provocar aceleración del ritmo cardiaco, lo que se conoce como el síndrome del corazón en vacaciones, que ocurre cuando se consume demasiado alcohol en un día.
Además, el consumo habitual y elevado se asocia al desarrollo de disfunción ventricular y la aparición de arritmias de diferente tipo.
Esto no quiere decir que debas dejar de beber, pero sí tienes que cuidar la cantidad y la frecuencia para mantener un corazón sano.
10. Cuidar el estrés
El estrés es uno de los factores de riesgo que hay que tener bajo control. Someter al organismo a tensiones puede provocar daños en la salud cardíaca.
Asimismo, es algo que puede conducir a otros problemas periféricos, como optar por hábitos menos saludables: ingerir alimentos altos en calorías, dormir menos, consumir más café, hacer menos ejercicio, etc.
Por estas razones, es muy importante tenerlo bajo control e implementar estrategias que ayuden a estar más relajados.
¡Cuida tu corazón y potencia tu calidad de vida!
Mantener un corazón sano requiere determinadas acciones, pero todas ellas valen la pena por los beneficios que tendrás en tu calidad de vida.
Toma en cuenta los consejos que te hemos dado y, de ser posible, piensa en la posibilidad de contar con un seguro de salud, que te permita tener acceso a médicos profesionales, como cardiólogos y nutricionistas, pues estos dos elementos son clave para conocer el estado de tu corazón y actuar a tiempo.
Si necesitas ayuda para elegir la mejor opción, en EBA Insurances podemos asesorarte para elegir el seguro de salud que se adapte a tus necesidades y empezar a prevenir enfermedades que pueden ser letales. ¡Contáctanos y comienza a cuidarte cuanto antes!
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