Consumir tabaco puede causar muchos padecimientos graves. Esta actividad es uno de los peores hábitos, pues causa efectos y daños en todas las partes del cuerpo, que pueden llegar a ser mortales.
Además, el tabaco, que contiene más de 7.000 sustancias químicas, no solo afecta a quienes lo consumen, sino también a las personas que conviven con ellos, llamados fumadores pasivos.
Las personas que fuman de manera frecuente y en exceso pierden aproximadamente 10 años de vida como mínimo y cada día más de 20 mil personas mueren a causa del tabaco y de la exposición al humo del mismo.
Las enfermedades por fumar más comunes
A pesar de que causa muchos efectos, nos vamos a enfocar en las 10 enfermedades por fumar más comunes para que, antes de consumir tabaco, lo pienses y puedas prevenir los daños.
1. Cáncer
El tipo de cáncer más común relacionado con el consumo de tabaco por supuesto que es el de pulmón, y es en el que todos piensan enseguida, pero, por desgracia, no es el único.
La enfermedad por fumar más común, en relación con este padecimiento, es el cáncer de pulmón. El tabaco es la causa de casi 9 de cada 10 casos de cáncer de pulmón, de acuerdo con el Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés).
Sin embargo, este hábito afecta a todo el cuerpo, y puede causar otros tipos de cáncer:
- Colon
- Recto
- Sangre
- Esófago
- Riñón
- Hígado
- Boca y garganta
- Páncreas
- Estómago
Las víctimas pueden ser fumadores activos o pasivos, así que por ti y por los demás, nuestra recomendación es que controles o elimines el consumo de tabaco.
2. Colesterol alto
Hay una estrecha relación entre el tabaco y el colesterol, por ello, decidimos incluirlo en esta lista de las 10 enfermedades por fumar más comunes.
Estos dos elementos están ligados porque el monóxido de carbono producido por los cigarrillos incrementa el colesterol malo, llamado LDL, y reduce el bueno, provocando que el LDL se acumule en las arterias y exista una mayor probabilidades de padecer isquemia (disminución de la circulación sanguínea) o aterosclerosis (acumulación de grasa y otras sustancias en la sangre).
Varios estudios han demostrado que las personas que fuman presentan signos más temprano de acumulación de grasa en las arterias que aquellos que no tienen este hábito.
3. Tuberculosis
Por mucho tiempo se tuvo la hipótesis de que fumar aumentaba el riesgo de contraer tuberculosis y ahora está comprobado. Y no solo eso, sino que perjudica la efectividad del tratamiento para combatir este padecimiento.
Alrededor de una cuarta parte de la población mundial padece una infección tuberculosa latente que, por el cigarro, podría activarse. Además, en fumadores la evolución de la enfermedad es más grave.
La tuberculosis afecta los pulmones, agravando el deterioro de la función pulmonar causado por el cigarrillo.
4. Diabetes tipo 2
La diabetes tipo 2 es otra de las enfermedades por fumar más comunes. El riesgo de padecer esta afección es más alto en personas fumadoras y se incrementa según el número de cigarros que se consuman al día.
El riesgo de sufrir diabetes aumenta hasta un 40% en fumadores. Algunas de las sustancias que contiene el cigarro puede incrementar los niveles de glucosa en la sangre, provocando resistencia a la insulina.
Por esta razón, entre más fumes, mayor es el riesgo de que desarrolles diabetes 2 y las posibilidades se disparan si tu familia directa padece diabetes.
5. Enfermedades cardiacas
Fumar tiene muchos efectos sobre el corazón. Puede provocar obstrucción o estrechamiento de las arterias, lo que puede ser causa de infartos de miocardio, apoplejía, crisis cardiacas, entre otros problemas de salud.
Al recibir menos flujo de sangre y oxígeno, es más probable que se padezca un infarto u otros padecimientos graves. No es casualidad que la reducción en el consumo de tabaco haga que bajen las tasas de enfermedades cardiacas, la principal causa de muerte en Estados Unidos.
Entre las enfermedades por fumar más comunes de este tipo, se encuentran: angina de pecho, infarto de miocardio y muerte súbita.
6. Asma
Consumir cigarrillos de manera frecuente acelera el deterioro de la respiración, por lo que aumenta la posibilidad de desarrollar asma, una enfermedad pulmonar crónica que dificulta la entrada y salida de aire de los pulmones. Esto sucede porque el humo del cigarro causa irritación en las vías respiratorias.
Aunque es más probable que el cigarro exacerbe los síntomas de quienes tienen este padecimiento preexistente, es un hecho que el consumo de tabaco aumenta las posibilidades de desarrollar asma.
Además, en caso de que las fumadoras estén embarazadas, se corre el riesgo de que el bebé, además de malformaciones, también padezca asma.
7. Enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC)
La bronquitis y el enfisema son dos de las enfermedades por fumar más comunes y en conjunto provocan EPOC (enfermedad pulmonar obstructiva crónica), que provoca que haya obstrucciones en la circulación del aire y causa problemas respiratorios.
El consumo de tabaco es la causa número uno de EPOC y no hay tratamiento para la cura de esta enfermedad; únicamente se puede retrasar su avance.
Entre los síntomas de este padecimiento, se encuentran:
- Tos duradera y que nunca se va del todo
- Dificultad para respirar más aun al hacer ejercicio
- Sibilancias (sonido de silbido al respirar)
- Presión en el pecho
8. Disfunción eréctil
De acuerdo con un estudio hecho en 2005 por American Journal of Epidemiology, los hombres que fumaron en su juventud o durante mucho tiempo tienen mayores probabilidades de sufrir disfunción eréctil, en comparación con quienes nunca lo hicieron.
En el caso de los fumadores jóvenes con disfunción eréctil, la causa más probable de su padecimiento es el tabaco, y este puede reducirse o mejorar los síntomas si se abandona el hábito del tabaco.
Esta enfermedad por fumar más común se debe a los efectos de las sustancias químicas del cigarro en los vasos sanguíneos del aparato reproductivo masculino. Las erecciones se producen cuando las arterias del pene se expanden y se llenan de sangre, luego de recibir señales de los nervios. Por tanto, si los vasos sanguíneos no se encuentran en óptimo estado, puede producirse la disfunción eréctil. Aunque el sistema nervioso se encuentre bien, puede no ser físicamente posible la erección por daño o deficiencia en los vasos sanguíneos.
9. Neumonía
Fumar reduce la capacidad que tiene nuestro cuerpo para combatir afecciones, incrementándose el riesgo de desarrollar neumonía.
Gran parte de las sustancias del cigarrillo causan alteraciones en los mecanismos de defensa pulmonares, haciendo a la gente más susceptible a padecer enfermedades respiratorias, como la neumonía.
Esta enfermedad por fumar no solo afecta a los fumadores activos, sino también a los fumadores pasivos, sobre todo a partir de los 60 años. El riesgo de desarrollarla disminuye de manera significativa cuando se deja el hábito del cigarro.
10. Inmunodeficiencia
El debilitamiento del sistema inmunológico puede provocar cientos de padecimientos, pues nuestro cuerpo pierde capacidad para defenderse ante virus, bacterias o diferentes afecciones.
Por esta razón, es más factible que las personas que consumen tabaco vean daños en su salud y que estos sean más graves que para quienes son no fumadores.
¡Protégete y evita las enfermedades por fumar!
Como has visto, las enfermedades por fumar pueden afectar tu cuerpo y tu vida de manera significativa, por lo que es muy importante que tomes consciencia y, de ser posible, abandones este hábito.
Sabemos que no es una acción sencilla, pero los beneficios son realmente altos y valen totalmente la pena.
Tu salud es lo más importante; sin ella, todo lo demás se ve afectado, así que cuídate tanto por ti, como por tu familia y la gente que te rodea. La calidad de vida siempre va a depender de una alimentación balanceada y de hábitos saludables.
